Desde Relieve y con ironía, pongo de manifiesto, que la novela Traidores es otra obra de teatro escrita por Keith W. Rowland, cuyas funciones son el entretenimiento a través de la crítica social y la ironía, que algunos llamarán burla. Lo que sí es innegable es que Traidores es una consecuencia inevitable de lo que ocurrió en Cataluña en octubre de 2017 y de las posteriores reacciones afeminadas y asustadizas de M. Rajoy, y las actuales e ignominiosas negociaciones entre los socialistas y Carles Puigdemont.
Y aunque en Traidores, Carles Puigdemont (un gomoso y fanático estafador que se cree que tiene ocho apellidos catalanes) deja de respirar porque lo envenenan; no deseamos la muerte violenta o por causas naturales en la vida real, de un personaje que ha puesto en jaque al presidente de España; y que le ha ofrecido material inédito a Rowland para escribir la biografía no autorizada, de un hombre que dividió a la sociedad catalana.
Por lo tanto, certifico, que nuestro cometido no reside en generar odio, ni señalar al que piensa diferente, de esas funciones ya se encargan los lacayos de la extrema izquierda y el PSOE o sus asociados, que son Bildu y los independentistas catalanes, que tienen las llaves del Congreso y de la Generalitat. Nuestro oficio es la construcción de calles que nos unan a través de la publicación de novelas, relatos, cuentos infantiles o poemarios.
Antonio Fernández, editor.
Granada, 25 de enero de 2024