La entrevista libro de Laura 07 es el segundo fragmento de la conversación que he mantenido con Rowland, el propósito es facilitar a quienes lean esta transcripción, una experiencia positiva y agradable, de la conversación que he mantenido con el autor de un libro triste y romántico.
Antes has respondido que nunca te haces preguntas en plan Nietzsche, porque no eres filósofo… Así es.
¿Y hay otros motivos? Más allá de mi escasa formación en filosofía, algunos de sus conceptos, siempre me han producido rechazado y pereza.
¿Pereza? Algunas de esas ideas filosóficas, son tan abstractas y empalagosas, que me pierdo, y es cuando desconfío de esas explicaciones, en ocasiones adornadas con una liturgia neoreligiosa y folclórica en el sentido explicativo de los conceptos, que no puedo seguir leyendo. Quizá porque no entienda nada, no lo voy a negar.
Cualquiera lo diría, al haber escrito Relojes Antiguos o Culpable… En esos dos libros y en este, lo que expreso son pinceladas de mis temores e inquietudes sobre la belleza, el nacimiento y la muerte, el placer y el dolor, la infancia o la familia. Son frases o párrafos en las que esquematizo mis conocimientos, y percepción de los temas que acabado de nombrar. Para mí, más allá de esa pequeña esfera filosófica que he construido, hay ruido y oscuridad.
Entiendo… Siempre me han interesado la parte más superficial de la filosofía, pero ir hacia las profundidades del pensamiento humano, es trabajo para hombres y mujeres con intereses más específicos y una formación universitaria que yo no tengo.
Al menos, tu literatura es una forma de dar respuesta a las preguntas que te haces… Sí, aunque es un reflejo de mi melancolía y miedos existenciales.
Tu enfoque es interesante, y es la estructura de casi todos tus libros, ¿no? Así es, no lo voy a negar. La belleza, el nacimiento y la muerte, el placer y el dolor, la infancia o la familia; pero también la violencia, el poder, la ambición, el desprecio, la burla o el dio; son los conceptos con los que estructuro las novelas que he escrito.
Con Culpable, sí que subiste tu nivel de exigencia… Bueno, al ser una novela psicológica, me extendí mucho más en las divagaciones desde distintas perspectivas. En esas páginas, me adentré en lo más profundo de Izan y del presidente.
¿Un trabajo peligroso? Y entretenido.
Ahora, una pregunta comprometida. De todos los libros que has escrito, ¿cuál es el más personal? No sabría cuál elegir, por la sencilla razón, de que Relojes Antiguos, El ratoncito Pérez, Corazones de madera, El pequeño Data o Lágrimas, son algunos de los libros que he escrito a mi hijo; historias muy tristes, en las que muestro mis temores filosóficos y literarios.